2-2: El Xerez no da motivos para creer en su salvación tras otro traspié en Chapín

El Xerez dejó escapar ayer una nueva oportunidad, quizás la última, para reengancharse a la pelea por la salvación. De los equipos de la zona baja, sólo el Tenerife consiguió ganar, pero una vez más los de Gorosito dejaron escapar el triunfo ante otro rival directo, el Racing, que mantiene su distancia de nueve puntos con los azulinos.
Si recurrimos a las matemáticas, el Xerez necesita ganar cuatro de los últimos cinco partidos para sumar números de permanencia, pero ni aún así la tendría garantizada, ya que no llegaría a los 40 puntos. Echando mano del calendario, estaría obligado a ganar los dos partidos de casa (Almería y Zaragoza) y dos de los tres de fuera (Barcelona, Valencia y Osasuna).
Por todo ello, es fácil deducir que los azulinos son ya virtualmente, salvo milagro, equipo de Segunda división.
Y eso que los jerezanos lo tuvieron ayer todo a favor. Tras un sensacional comienzo en el que anularon al Racing con una presión asfixiante, se adelantaron a los 5 minutos por mediación de Orellana, desdepués de una buena combinación en la banda entre Míchel y Momo.
El Racing acusó el golpe, pero se repuso pronto, sobre todo porque el Xerez dio un incomprensible paso atrás y se dedicó a sestear durante una hora de partido a pesa de lo mucho que se jugaba.
Una tromba de agua espectacular marcó el desarrollo del primer acto, en el que sólo el equipo de Portugal quiso. Sin embargo, las llegadas se limitaron a sendos lanzamientos desde larga distancia que no inquietaron a Renan.
Cuando la primera mitad llegaba a su fin, un error garrafal defensivo permitió a Crespo colarse hasta la linea de fondo y centrar al primer palo para que Tchité empatara.
El "regalo" defensivo pasó factura al equipo azulino, que ya en la reanudación se vio que iba a remolque del rival. El partido no pintaba nada bien para el Xerez, pero en el banquillo Gorosito tampoco acertaba a dar soluciones. Sobre la marcha se le ocurrió dar entrada a Alustiza, pero el centro del campo lo seguía teniendo perdido y con él el control de la situación por parte del Racing.
De esta forma, Arana puso a prueba en dos ocasiones a Renan, que salvó primero un mano a mano y luego sacó con agilidad un balón que se colaba de córner directo.
Lo que todo el mundo, menos Gorosito, intuía que podía pasar, pasó. Antes de la hora de partido, Iván Bolado pisó el área y cayó entre Víctor y Leandro. El árbitro no dudó y Tchité le dio la vuelta al marcador.
La cosa pudo ser peor, porque poco después Renan desvió a córner un disparo raso y ajustado de Colsa.
El mismo Xerez plano de hace unos meses reapareció en el momento más inoportuno, pero en una acción aislada Casado sirvió desde la banda y Victor cabeceó a gol el empate.
Los más descorazonador es que con más de veinte minutos por delante y toda una temporada en juego, el único bagaje ofensivo de los locales fue un derechazo de Víctor que repelió a córner Coltorti.
Por contra, el Racing bien pudo llevarse los tres puntos en tres contragolpes en los que los de Portugal perdonaron la vida a un rival que huele casi irremediablemente ya a Segunda división.