domingo, 24 de enero de 2010

1-2: Al Xerez le funcionó el "efecto Gorosito" mientras le acompañaron las fuerzas


El Xerez cerró una vuelta decepcionate con los guarismos más pobres que se le recuerdan a un colista en la Primera división. Y lo hizo con el signo que más ha repetido en estas primeras diecinueve derrotas, con una derrota.
La enésima decepción azulina no pudo evitarla ni el debú en el banquillo del "Pipo" Gorosito, ni el estreno en el palco del nuevo propietario, Federico Souza; ni el amago de reacción del equipo por el "efecto Gorosito", que le duró mientras le dejaron las fuerzas.
Al igual que sucedió en la Copa, el Osasuna de José Antonio Camacho volvió a demostrar que le tiene tomada la medida al cuadro azulino. Tres victorias en otros tantos partidos así lo constatan.
Anque bien es cierto que ayer el choque estuvo bastante más igualado, sobre en todo en una primera mitad bastante digna por parte del colista.
El cambio de entrenador, como suele ocurrir, trajo consigo un equipo con otra actitud, más agresivo y presionando más la salida del balón del rival. Los primeros minutos de los locales fueron esperanzadores, aunque una vez más el primero en dar fue el Osasuna. Y ya se sabe que el que da primero, da dos veces.
En su primera aproximación con peligro, los rojillos se adelantaron en el marcador antes del minuto 10. Aranda le ganó la posición a su marcador y disparó cruzado, pero Renan detuvo, aunque su rechace lo aprovechó Monreal para enviar el balón a la red.
El Xerez acosó el tanto en los minutos siguientes. Sin embargo, el exceso de relajación de los osasunistas y el empuje de los jerezanos dio lugar al empate. Mediado el primer acto, Momo sacó a relucir el guante que tiene en la zurda para colocar a Mario Bermejo en bandeja la igualada.
Tras el tanto, los azulinos recobraron el tono del arranque y siguieron inquietando a su rival, pero si reflejo en el marcador.
El esfuerzo de la primera mitad lo notaron los de Gorosito en la reanudación. El Osasuna tapó todas las vías de llegada de los locales y sólo tuvo que esperar su oportunidad. Un remate de cabeza mordido de Calvo fue todo el bagaje ofensivo del colista en toda la segunda mitad.
Perder el balón fue la muerte para un Xerez que a falta de diez minutos para el final vio como se repetía de nuevo la historia de cada domingo. Juanfran aprovechó un resbalón de Casado para colarse hasta la cocina y servir en boca de gol a Camuñas el segundo tanto, que no celebró por respeto a su pasado xerecista.
Pese a tener minutos por delante para tratar de amarrar al menos un punto, el Xerez se rindió. Su falta de fondo físico fue un lastre y para los de Camacho todo fue coser y cantar.

Foto: www.diariodejerez.es

9 comentarios:

Pablo Pérez Lavilla dijo...

¿No crees que Gorosito se equivocó en los cambios, sobre todo en el de Viqueira? Armenteros debería haber ido convocado para dar más posibilidades ofensivas. Muy cruda está la cosa Eugenio...

Miguel Ángel Borrego Soto dijo...

A mí me gustó el planteamiento de Gorosito, pero como apuntas en tu crónica, a este Xerez le falta fuelle, no aguanta un partido completo. Con Viqueira y Abel sobre el terreno de juego el Xerez se acercó al área rival, pero como siempre, en el borde del área nos diluimos como una aspirina. Esta plantilla está un escalón por debajo del resto de equipos de la parte baja de la tabla. Sólo falta planificar una futura temporada en Segunda y que la la segunda parte de esta Liga no sea tan ridícula. Con Esteban Vigo, el año de la salvación encadenamos varias derrotas consecutivas hasta que empezamos a ganar y no paramos. Claro, eso fue con una plantilla de Segunda en una categoría de su nivel. Este año pintan bastos.

Eugenio Camacho dijo...

Pablo, comparto tu opinión con respecto a los cambios. Fueron propios de quien conoce la plantilla de tres sesiones de entrenamiento mal contadas. Eso es lo que pasa cuando se liquida a un cuerpo técnico y se da entrada a otro totalmente nuevo, que al no quedar nadie hay que empezar de cero en muchos aspectos.
Con respecto a lo que comentas, Miguel Angel, veo que por fin coincidimos en que esta plantilla no tiene más cera de la que arde y que poca culpa tenía Ziganda. De todas formas, creo que el factor psicológico ha jugado y sigue jugando un papel fundamental en la trayectoria de un equipo cogido moralmente con alfileres desde el primer partido en Palma.

Carlos Jurado Caballero dijo...

Dicen que faltan goleadores y lo que faltan son proveedores de balones de gol. Unas bandas (Redondo y Casado) ofensivamente nulas, nadie de último pase en el centro del campo y Carlos Calvo, Orellana y Momo que han olvidado su capacidad de desborde. El año pasado el juego era fluido porque estaban Viqueira, Momo, Calvo con los relevos ofensivos de Mendoza y Francis.

José Manuel dijo...

Buenas, Sr. Eugenio. Con respecto a su opinión sobre Ziganda (le he leído y escuchado en varias ocasiones) no estoy de acuerdo con la quita de responsabilidad que le brindas ("...poca culpa tenía Ziganda") a uno de los peores técnicos que han pasado por Chapín.

Seguramente estaremos de acuerdo que, por supuesto, no es el máximo responsable de los males de nuestro equipo, pues eso sabemos que tiene nombres y apellidos, pero a nivel técnico no ha dado una a derechas.

Si tu te encontraras con un equipo cortito, cortito, en cuanto a presupuesto y por tanto en cuanto a jugadores de calidad contrastada para la categoría...¿Qué harías?.

Yo lo tengo claro. Ya que el atributo calidad no lo puedo poseer deberé sacar brillo a otros atributos que sí deberé potenciar. Por ejemplo, presión asfixiante al rival con objeto de destruir su juego (ya que no podremos proponer futbol), gran balance defensivo (buscaremos ser el equipo que mejor defienda), gran trabajo en la jugadas de estrategia, excelente preparación física, forma de juego bien definida desde el principio pues la propia limitación de la plantilla me delimita mi forma de juego, deberé ser un gran psicólogo, deberé sacarle el máximo rendimiento a todos los integrantes del plantel, deberé formar una piña en el vestuario.

Me puede Vd. decir cuál de estas ha hecho el Sr. Ziganda???

Y todavía tiene más delito el hecho de que si alguien estaba experimentado en esta categoría ese era él y su equipo técnico.

La verdad, Sr. Eugenio, es que no tengo ninguna razón para no pensar que este Sr. y los suyos han venido a Jerez de paseo.

Eugenio Camacho dijo...

Me alegro, José Manuel, que tengas claras tus ideas, pero yo sólo las comparo en parte. Creo que Ziganda triunfará en los banquillos, como antes lo hicieron otros entrenadores a los que aquí echamos a patadas porque no valían: Ben Barek, Naya, Irulegui, Orúe, Chaparro, Alcaraz...
Qué quieres que te diga, pero estoy totalmente con el modelo británico respecto a los entrenadores.

José Manuel dijo...

Todos los entrenadores que Vd. menciona tenían o tienen una manera de ver el fútbol y mueren con su idea, guste aquí o no, pero sus ideas y conceptos los tienen muy muy claritos.

El Sr. Ziganda no se si triunfará o no en los banquillos, lo que si le digo es que como actúe como en Jerez no va a tener muchos más fracasos pues pronto caerá en el olvido como han caido muchos colegas suyos. El problema de este hombre es que no ha mantenido una línea de trabajo constante en la que crea, ha titubeado, ha dudado, y en muchos momentos parecía que no sabía por dónde le venía la película.

Estoy muy de acuerdo con Vd. en lo referente al modelo británico y lo comparto como el que más, pero no sé lo que tendrá que ver esto con el Sr. Ziganda..., en estos equipos británicos se suelen fichar a entrenadores con unas ideas contrastadas y muy bien definidas, e incluso éstas se llevan a efecto en todas las categorías inferiores de ese equipo. Todos los entrenadores que Vd. mencionó anteriormente tienen su sello y aquí quedó reflejado, yo la verdad, y bajo mi humilde opinión, no se a qué ha jugado el Sr. Ziganda y que valores pontencia en una plantilla.

Y que conste, que el que le habla vió con muy buenos ojos el fichaje de Ziganda, y cuando otros perdían los nervios, yo pedí paciencia, pero entiendo que no se puede ir en contra de la evidencia.

Anónimo dijo...

Para mí, José Manuel, la mayor evidencia es que Ziganda se vio obligado a jugarse el todo o nada aceptando la oferta del Xerez. De otra forma sí que hubiera tenido volver a entrenar en Primera, ya que ser despedido del Osasuna, aunque precipitadamente, no era la mejor carta de presentación para seguir entrenando en la mejor Liga del mundo. Ya sabemos cuál ha sido el resultado de esa apuesta arriesgada.

Eugenio Camacho dijo...

El da antes era yo. Perdón por el error.