
No era normal que con lo poco que habíamos puntuado, hasta las once menos diez de la noche de ayer -hora en la que terminó el Atlético-Español, con goleada de los rojiblancos, que son los que marcan la permanencia- el Xerez siguiera sumando números de salvación. Sabíamos que, tarde o temprano, los de Quique Sánchez Flores iban a reaccionar, y ese momento ha llegado.
Y lo ha hecho quizás en la semana menos oportuna. En algo más de cuarenta y ocho horas visita Chapín el Barça, por lo que probablemente dentro de setenta y dos el Xerez podría seguir siendo colista, pero con un partido más que el resto de rivales.
Lo dramático es que el sábado nos visita el "Pupas", con los Agüero, Forlán, Reyes y Simao en plena escalada. En condiciones normales, el domingo por la noche tendremos que empezar a ver los puestos de salvación con prismáticos, justo lo que queríamos evitar a toda costa antes de las Navidades. Nuestro consuelo es que los partidos, antes de ganarlos, hay que jugarlos.
El que avisa no es traidor, y ya advertíamos que los choques ante Valladolid, Sporting y Getafe eran claves para sumar un colchón de puntos que nos permitieran tomar oxígeno ahora que llegan curvas peligrosas.
Pero, cuando teníamos que estar todos a una, nos hemos perdidos en debates estériles: que si firmas, que si Franco o Armando Bronca Segura, que si vendo, que si te compro, que si no tengo dinero...
Al final, el saldo de dos puntitos, por muy injusto que fuera el empate ante el Sporting y por muy riguroso el penalti y la expulsión de Prieto el domingo, nos dejan con el agua al cuello.
Hasta Pascuas, nos conformaríamos con sumar los tres puntos en El Sardinero, para no entrar en el Año Nuevo más cerca de Segunda que de Primera.
Los que van a volver a tener unas vacaciones moviditas son Rondán y Poyatos. Sin un chavo, van a tener que hacer encajes de bolillos para que este Xerez no sólo no se desfonde, sino que no termine haciendo el ridículo -con en Getafe- en su año más histórico. Confío que lo de "Maldogol" -vaya tela- y lo Orellana -más que "Poeta", un "poema"- haya servido de lección.