sábado, 6 de noviembre de 2010

Pitos y flautas


La afición del Xerez está más legitimada que nunca este año para exteriorizar como quiera su enfado mayúsculo con el equipo. Superar la barrera de los 11.000 abonados después de bajar de categoría otorga a la hinchada azulina (sobre todo a los que se "chuparon" más de 600 kilómetros de carretera) todo el derecho a indignarse con el bochornoso espectáculo protagonizado por los jugadores hace una semana en "Los Cármenes" de Granada.
Del mismo modo, está en todo su derecho de cuestionar la capacidad o no de Javi López para dirigir al equipo y de ensañarse con los futbolistas que están demostrando ser tan sólo la sombra de lo que fueron, y cuyos nombres no escribiré porque están en la mente de todos.
Creo que esto no admite discusión, y que si el equipo es recibido esta tarde con una sonora pita y a las primeras de cambio afloran los pañuelos en la grada, el respetable, como siempre, tendrá la razön.
Ahora bien, si esto es lo más conveniente para los futbolistas, y por añadidura, para el club, ya es harina de otro costal.
La "manita" encajada a los pies de la Alhambra puede suponer un peligroso punto de inflexión para los azulinos esta temporada. Lo mejor son los 15 puntos obtenidos (casualmente los mismos que un Granada que, según todas las crónicas, huele a Primera división). Esos ya no nos lo quita nadie. A partir de ahora, a sumar 35 más, por lo civil o por lo criminal, para evitar la gran tragedia. Y ahí los pitos, las prisas y las presiones restarían más que sumarían.

1 comentario:

Miguel Ángel Borrego Soto dijo...

Te doy toda la razón, Eugenio. Sin embargo, a mí Javi López sigue sin convencerme, creo que no es el patrón adecuado para esta nave. Tal vez todos queremos, aunque sólo lo pensemos, ver a nuestro equipo en la parte alta de la tabla luchando por volver a Primera, y ese es el primer error. La plantilla es la que hay y a lo mejor no da más que para aguantar el tirón no más de media tabla hacia abajo. Creo que no, que se puede exprimir mucho más a estos jugadores. Esta tarde toca ganar, aunque sufriendo, seguro.
Y en Granada, ciudad que adoro y en la que viví unos años, que no se lo crean tan pronto. Geijo se desinflará, como hace siempre, Orellana todos sabemos de lo que es capaz, Abel lo mismo, y así un largo etcétera. Si hay algo claro es que a diferencia del juego del Xerez este año, la Segunda División es poco previsible, tal vez con permiso del Betis. Al tiempo. Un abrazo.