sábado, 6 de marzo de 2010

"Alustizas" y "Vigneris"


Lo mismo que Jorge Valdano –para variar- acuñó en su día lo de la política de “Zidanes y Pavones”, Souza y su equipo están a punto de poner sobre el tapete una nueva forma de entender el negocio del fútbol.

A esta política la llamaremos la de los “Alustizas y Vigneris”. Es decir, jugadores que llegan del otro lado del charco, a los que no quieren los clubes modestos de ligas menores, y volando voy, volando vengo y por el camino yo me entretengo. Sin entrar a valorar el fichaje de Alustiza, el caso del uruguayo es flagrante. Si el futbolista dice cobrar menos de 60.000 euros y se encontraba entrenando en un club que le había hecho el favor porque se había quedado sin equipo, ¿dónde están los más de 250.000 euros restantes de la operación?

Una cosa es que nadie dude de que Souza no ha llegado al Xerez por amor a unos colores, como tampoco antes Oliver, Silgado y Morales, y otra que el mercadeo de jugadores se convierta a las primeras de cambio en una merienda de negros sin el menor disimulo y a la vista de todos.

O el dueño del Xerez sale de inmediato a la luz pública a aclarar las gravísimas acusaciones del representante de Vigneri contra Gorosito y a poner algo de orden, o mucho que me temo que este proyecto empezará a descomponerse mucho antes de lo previsto.

También tendrá mucho que decir en este asunto Federico Lussenhoff, cuyo papel de asesor-jugador de otro equipo de otra liga de otro país de otro continente no me merece la más mínima fiabilidad.

Mucho me temo que la política de “Alustizas y Vigneris” no ha hecho más que empezar. Por mi parte, me conformo con que alguien pueda parar esta sinrazón que puede ser la puntilla para un Xerez Club Deportivo que sigue siendo un juguete roto en manos del mejor postor.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué malo eres hijo, eres muy prepotente en la radio, eres un creído a ver si se va a tomar por saco tu xerez

Eugenio Camacho dijo...

Ole los valientes como tú, sr. Anónimo.