sábado, 20 de febrero de 2010

2-1: El Xerez se borra de la lucha por la salvación tras cuajar en Riazor su peor partido


El último tren de la permanencia para el Xerez pasaba inexcusablemente por Riazor. Después de dos derrotas consecutivas, ante el Dépor se imponía una reacción del equipo de Gorosito, muy descogado a diez puntos de los puestos de salvación.
Pero el Xerez mostró su peor versión desde la llegada al banquillo del técnico argentino. Por primera vez, el equipo mostró una involución más que preocupante en una exhibición de mediocridad y falta de ambición que parece condenarle irremediablemente a la Segunda división.
Bien es cierto que Pérez Lasa tampoco ayudó. El vasco se sumó al espectáculo infumable de unos y otros para que no faltara de nada en una tarde para olvidar cuanto antes.
Todavía no se había cumplido el segundo minuto de juego cuando un balón colgado al área fue cabeceado por Colotto, en pugna con Moreno. En apariencia, una de las muchas jugadas que se dan en las dos áreas en cada partido. Aunque la incredulidad de unos y otros, el colegiado vasco pitó pena máxima y Guardado encarriló el camino del triunfo para los locales.
La acción hizo perder los nervios a Gorosito, que fue expulsado, y acto seguido una contra del Dépor dio lugar al segundo gol, obra de Riki.
Con 2 a 0 a los seis minutos, el partido prometía ser eterno para un Xerez desconcertado y descolocado.
Los azulinos fueron un juguete roto en manos de un Dépor que a la contra pudo matar el partido, pero no lo hizo.
Así hasta en el minuto 37, cuando un centro de Víctor Sánchez sin aparente peligro fue cabeceado certeramente por Bermejo lejos del alcance de Aranzubía. Mayor efectividad, imposible: una llegada al área, un gol.
Antes incluso del descanso los jerezanos pudieron empatar, el libre directo lanzado por Momo fue atrapado por el meta deportivista.
En la reanudación el Xerez pareció no ser al menos el pollo sin cabeza de la primera mitad. Los xerecistas quisieron más el balón, pero fue incapaz de crear un sola situación de gol en 45 minutos.
La entrada al campo de Alustiza, Viqueira y Antoñito no fue solución para un equipo fallón atrás y poco ambicioso y carente de agresividad en ataque.
El Dépor, que al menos tenía la disculpa de estar defendiendo marcador favorable, tampoco le fue a la zaga. Su bagaje atacante fue algo mejor que el de su rival: un chut de Juan Rodríguez al travesaño superada la hora de partido.
Pese a la mínima ventaja, el Xerez nunca dio sensación de poder empatar el partido ante un cuadro coruñés tremendamente cómo que sólo tuvo que esperar al final del encuentro para sumar tres puntos y romper la dinámica negativa de las tres jornadas anteriores.

4 comentarios:

Pablo Pérez Lavilla dijo...

Estamos ya sentenciados. Los jugadores saltan al campo sin intensidad, dan la sensación de que no son conscientes de lo que se juegan jornada a jornada. Parecen impasibles ante todo... En fin, fue bonito mientras duró.

Eugenio Camacho dijo...

Estoy contigo en que lo tenemos muy crudo, pero no creo que a los jugadores les falte intensidad y no sean conscientes de lo que está en juego. El problema concreto de ayer fue que el árbitro se cebó con el colista a las primeras de cambio. Vamos, como si a los equipos rivales encima les hiciera falta el favor arbitral para pasaronos por encima. Después todo fue mucho más fácil para el Dépor, y al Xerez le cuesta un mundo tirar cuesta arriba.

Anónimo dijo...

El Xerez es un barco que se hunde y todo el mundo ya solo piensa en abandonar el barco y salvarse. La mayoría de los futbolistas estan pendientes de la próxima temporada: Los que terminan contrato, buscando mejores oportunidades y los cedidos lo mismo, salvo que se puedan quedar en su equipo de origen.

Eugenio Camacho dijo...

Yo quiero pensar que no es así.