viernes, 15 de enero de 2010

Los argentinos



Pensaba que lo de Morales era el penúltimo farol para evitar la que se le venía encima con la manifestación convocada en su Dos Hermanas natal, pero los argentinos ya están aquí, y al parecer llegan para quedarse.
Confieso que, a priori, esta opción era la que menos me atraía de todas cuantas se han barajado en los tres últimos años para hacerse con el Xerez. Y no es que tenga nada en contra de Argentina y sus habitantes, todo lo contrario. Argentina era mi tía Mecha, una anciana encantadora casada con un primo de mi abuela materna que, ya viuda, visitaba cada verano en España a la familia de su marido y se ganó el cariño de todos.
Argentino era también Sanabria, el jugadorazo con el que dimos para siempre en el Xerez un salto de calidad que todavía hoy perdura. Y Fontana, Nannini, Comisso, Rojas, Guede, Timpani, Otta, Ale, Padula, Dani Pendín, Zárate, Gaitán, Leandro... Unos con más acierto que otros, pero cada uno escribió alguna página de la historia de este club.
Lo que ocurre es que los episodios no tan lejanos de Leganés y Badajoz lo ponen a uno en alerta.
A los que desconfían ya de los buenos propósitos con que llega este grupo a un equipo medio descendido y en pleno concurso de acreedores, les propondría conceder un período de gracia.
Estos señores desembarcan en el Xerez buscando hacer negocio porque, por desgracia, ya no hay mucha gente dispuesta a meterse en este berenjenal del fútbol por amor a unos colores.
A ver si al final, tan dados que somos aquí a ponerle la alfombra roja a cualquier hijo de vecino antes de calarlo, vamos a pecar por defecto más que por exceso. Que todavía me pitan los oídos cuando recuerdo las ovaciones de bienvenida a Oliver y Silgado.
Habrá que estar vigilantes, pero antes de opinar habrá que dejarles hacer. Mucha suerte.

1 comentario:

Wakisney dijo...

El beneficio de la duda lo tendrán prácticamente de todo el xerecismo. Pero lo que tienen que tener claro estos argentinos es que han comprado un club asentado en un polvorín.

Creo que se les criticará y elogiara, según sea el caso, con el mismo rigor y justa medida (esto según cada cual) que a sus antecesores, pero lo que está claro es que nadie que tenga un mínimo de cariño por el Xerez y pueda manifestarlo va a dudar en coger el hacha de guerra si esto se parece a los engendros de Leganés o Badajoz aunque sólo sea en el blanco de los ojos.

Abogo por que los argentinos se traigan de allí sistemas de trabajo y proyectos deportivo-económicos. Eso significaría que al menos tendriamos proyectos que ahora no lo tenemos en ningún área del club. Pero que no piensen en argentinizar el Xerez que si BBVA, BSCH o Repsol se adaptan a aquellos países donde invierten, por qué no lo iban a hacer estos señores.

Estaremos ojo avizor

PD: Me encantó Pedro Alemán en el Ser Deportivos del Jueves ;)