Al igual que en su debú liguero, el Xerez tampoco fue inferior a su rival en su estreno en Chapín como equipo de Primera división. Sin embargo, al igual que en Mallorca, los del "Cuco" Ziganda volvieron a tenerlo todo en contra para poder estrenar su casillero de puntos.
Esta vez no sólo fueron los errores propios, sino también un penalti en contra, un gol en propia puerta y otro expulsado -el capitán, Mendoza- los obstáculos que el debutante en la categoría tuvo que afrontar. Demasiados quizás para poder ser sorteados por un novato.
El juego azulino no fue tan brillante como en su puesta de largo en el Ono Estadi. Enfrente, el Athletic "made in Caparrós" no concedió ni un solo respiro, ni un solo metro. El Xerez nunca estuvo cómodo frente a unos leones que no fueron tan fieros como lo pintaban, pero que tiraron de oficio y de tablas en la categoría para llevarse el mejor premio.
Pero un zapatazo de Bergantiños, que se envenenó tras tocar en un defensa, estuvo a punto de hacer añicos el guión de los bilbaínos. Iraizoz, con un paradón, lo evitó.
Después llegó un penalti por unas manos involuntarias de Abel que pudo inclinar el marcador del lado visitante. La decisión encrespó a todos menos a Renan, que adivinó la intención de Javi Martínez y dejó sin efecto el regalo arbitral a los rojiblancos.
En la acción siguiente, del que pudo ser el 0 a 1 pudo pasarse al 1 a 0, pero a Armenteros le faltó serenidad para culminar en gol una buena contra.
La primera mitad discurría con dominio alterno, pero sin claras ocasiones. Las defensas se imponían sin problemas a las delanteras y el excesivo juego por el centro diluía las intentonas de unos y otros.
Pero el primero que lo intentó por banda en el uno contra uno triunfó. Y ese fue Susaeta, que se marchó de Mendoza y centró sin precisión pero con la potencia suficiente como para que Prieto desviara y batiera a su guardameta.
El Xerez acusó el tanto, y el Athletic también, porque automáticamente entregó el mando del partido a los de Ziganda.
A falta de hacerlo en jugada, el Xerez tiró de acciones a balón parado para buscar el empate. Casi al filo del intermedio, Francis no pudo empujar en boca de gol un remate de Aythami a la salida de un córner.
Sin embargo, fue el Athletic el que pudo sentenciar con un centro desde la izquierda de Toquero que Llorente cabeceó al travesaño.
En la reanudación, el Xerez insistió en su dominio, y el Athletic se encerró atrás. A la contra, Renan se empleó a fondo ante Llorente y Susaeta, pero las acciones de mayor peligro fueron locales. Momo por dos veces, pero sobre todo Viqueria, rondaron el gol. Otra vez más, no hubo suerte.
Esta vez no sólo fueron los errores propios, sino también un penalti en contra, un gol en propia puerta y otro expulsado -el capitán, Mendoza- los obstáculos que el debutante en la categoría tuvo que afrontar. Demasiados quizás para poder ser sorteados por un novato.
El juego azulino no fue tan brillante como en su puesta de largo en el Ono Estadi. Enfrente, el Athletic "made in Caparrós" no concedió ni un solo respiro, ni un solo metro. El Xerez nunca estuvo cómodo frente a unos leones que no fueron tan fieros como lo pintaban, pero que tiraron de oficio y de tablas en la categoría para llevarse el mejor premio.
Pero un zapatazo de Bergantiños, que se envenenó tras tocar en un defensa, estuvo a punto de hacer añicos el guión de los bilbaínos. Iraizoz, con un paradón, lo evitó.
Después llegó un penalti por unas manos involuntarias de Abel que pudo inclinar el marcador del lado visitante. La decisión encrespó a todos menos a Renan, que adivinó la intención de Javi Martínez y dejó sin efecto el regalo arbitral a los rojiblancos.
En la acción siguiente, del que pudo ser el 0 a 1 pudo pasarse al 1 a 0, pero a Armenteros le faltó serenidad para culminar en gol una buena contra.
La primera mitad discurría con dominio alterno, pero sin claras ocasiones. Las defensas se imponían sin problemas a las delanteras y el excesivo juego por el centro diluía las intentonas de unos y otros.
Pero el primero que lo intentó por banda en el uno contra uno triunfó. Y ese fue Susaeta, que se marchó de Mendoza y centró sin precisión pero con la potencia suficiente como para que Prieto desviara y batiera a su guardameta.
El Xerez acusó el tanto, y el Athletic también, porque automáticamente entregó el mando del partido a los de Ziganda.
A falta de hacerlo en jugada, el Xerez tiró de acciones a balón parado para buscar el empate. Casi al filo del intermedio, Francis no pudo empujar en boca de gol un remate de Aythami a la salida de un córner.
Sin embargo, fue el Athletic el que pudo sentenciar con un centro desde la izquierda de Toquero que Llorente cabeceó al travesaño.
En la reanudación, el Xerez insistió en su dominio, y el Athletic se encerró atrás. A la contra, Renan se empleó a fondo ante Llorente y Susaeta, pero las acciones de mayor peligro fueron locales. Momo por dos veces, pero sobre todo Viqueria, rondaron el gol. Otra vez más, no hubo suerte.
1 comentario:
La prensa de fuera, nacional, no cree en el Xerez, ya nos dan por descendidos, con dos jornadas jugadas. A lo mejor aciertan, somos los novatos de la categoría y, tal vez, los más pobres, pero ilusión y calidad no nos faltan. Este equipo va a seguir creciendo y le vamos a dar en la cara a esos agoreros que aún sin haber visto al Xerez jugar, lo descartan para cualquier quiniela que no sea la del descenso. Bien por Ziganda y por el Xerez, esperemos que llegue pronto el gol.
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