Los había con más nombre, más experiencia, más ilustres, más mediáticos e incluso más rubios, pero después de escucharle en su presentación, seguro que muchos habrán comprendido que lo que necesitaba el Xerez para el banquillo en la temporada más importante de su historia era un perfil muy parecido al del "Cuco" Ziganda.
Reconozco que en aquellos días de rabia, melancolía y, sobre todo, confusión por todo lo que rodeó la marcha de Esteban Vigo, el cuerpo me pedía un "galáctico". Pensaba que era lo mejor para levantar la moral de una hinchada decepcionada, por decirlo finamente.
Transcurridas casi dos semanas, y ya con la cabeza más fría y los acontecimientos puestos en orden, la contratación de Ziganda y Goico me parece un acierto más del tantas veces denostado tándem Rondán-Poyatos.
Lejos de la pomposidad y la repercusión mediática de otros entrenadores más ilustres, lo que le va a venir de perlas a la "cenicienta" de la Primera división es la gran dosis de ilusión que ya imprime al nuevo proyecto José Ángel Ziganda. El otrora "Cuco" del área se muere de ganas por demostrar que puede ser tan buen entrenador como gran delantero. El tren ha pasado por su puerta por segunda vez, y aunque esta vez los vagones amenacen con descarrilar, dada la difícil "empresa" que tiene por delante, por ilusión nadie nos puede ganar.
Compromiso, ganas, pelea, han sido algunos de los términos más repetidos por Ziganda en sus primeras horas como entrenador del Xerez. Y seguro que los va a necesitar en cantidades industriales.
Entiendo que hubiera quien, en el fondo, estuviera disfrutando como cerdo en un fangal ante la demora en la llegada del nuevo técnico y los fichajes, el "culebrón" de la compraventa del club y la tardanza en los precios de los abonos. Ellos se lo pierden, porque el éxtasis futbolero ya es imparable, el sueño de jugar en Primera ya está aquí, las lágrimas por el ascenso ya son historia, y Esteban Vigo, también. Prepárense porque lo mejor está por llegar.
(Foto: xerezcd.com)
1 comentario:
Hay dos aspectos de Ziganda que yo destacaría después de bucear por los foros osasunistas: el rpimero que es un entrenador "buena gente" y dialogante; y el segundo que es un poco "amarrategui" sin soltar el doble pivote.
Ambos me parece una buena prolongación del de Velez-Málaga siempre y cuando lo segundo lo segundo sea compensado con buenas bandas al estilo Momo.
Por cierto Eugenio, gran artículo y coincido contigo casi al 100 por 100.
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