domingo, 28 de noviembre de 2010

1-1: El Xerez, víctima de su apatía, se deja dos puntos tras un pésimo partido en Albacete


Resulta descorazonador, pero pocos motivos convincentes deben encontrar a esta hora los jugadores del Xerez para explicar la desgana con la que se emplearon ayer en Albacete ante un rival contra las cuerdas que mucho tendrá que mejorar para no ser carne de Segunda B.
Cuando parecía que el equipo había adquirido por fin la velocidad de crucero para presentar sus credenciales como candidato a jugar la promoción, el Xerez de los contrastes, el conjunto irregular que desconcierta al más fiel de sus seguidores, apareció de nuevo en su peor versión.
Y lo hizo para dejar escapar una victoria que parecía cantada en el Carlos Belmento. Tarde fría y desapacible, rival ansioso por escapar de la zona de peligro, sin apenas público en la grada. Todo parecía planeado para sumar tres puntos, pero falló lo esencial, la motivación de un equipo que nunca quiso. Con esta actitud a lo máximo que podremos aspirar es a no pasar apuros para mantenernos en la categoría.

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