sábado, 20 de marzo de 2010

2-1: Épico triunfo del Xerez, que tuvo que sobreponerse a todos los contratiempos posibles


Seis puntos sumados de los últimos nueve posibles conceden al Xerez una remotísima opción de seguir soñando con la permanencia. Después de doblegar hace quince días al Málaga en La Rosaleda, el equipo de Gorosito encadenó un nuevo triunfo, esta vez ante un rival directo como el Tenerife.

La victoria de los azulinos tiene todo el mérito, habida cuenta de los muchos obstáculos que debieron superar para alcanzarla: un penalti en contra, un expulsado y dos lesionados.

La clave para la consecución de los tres puntos estuvo en el demoledor arranque. A los seis minutos de juego, los locales ya dominaban en el marcador. Orellana sirvió desde la derecha, Michel dejó pasar en el primera palo, Bermejo remató y Aragoneses detuvo pero rebasó la línea de gol con el balón bloqueado. El colegiado dudó, pero el línea dio el gol.

El Tenerife, muy necesitado de los tres puntos en casa del colista, no se repuso al tempranero gol y antes del cuarto de hora encajó el segundo. Esta vez sirvió Carlos Calvo, Leandro cabeceó al palo y el rechace lo recogió Aythami para empujar el balón.

Hasta la media hora el Tenerife no pareció reaccionar. En una acción individual, Ayoze puso a prueba a Chema.

El mismo protagonista pudo marcar poco después en un libre directo que se estrelló en el palo. La acción continuó y el remate de Alfaro lo repelió la mano de Redondo. Penalti y amarilla para el sevillano.

Nino lanzó la pena máxima, pero Chema sacó una mano sensacional evitando que los tinerfeños se metieran en el partido. Hasta el descanso poco más.

Como se preveía, el equipo de Oltra salió en tromba en la reanudación, de forma que tardó sólo tres minutos en acortar distancias, al cabecear Nino un servicio de Alfaro.

De repente, todos los fantamos volvieron a Chapín, que pareció lamentarse de que una nueva remontada rival estuviera al caer.

Gorosito tuvo que hacer hasta dos cambios antes de la media hora por las lesiones de Mendoza y Keita, y el equipo acusó la falta de recambios cuando el Tenerife imprimió toda la intensidad al juego.

Pero esta vez el colista sacó todo su carácer y su coraje para atar su cuarta victoria en lo que va de campeonato que al menos le sirve para no descolgarse definitivamente de la lucha por la permanencia.

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